Corren nuevos momentos de consumo para las frutas y hortalizas. Los formatos de ahorro, a granel y la marca de la distribución están ganando relevancia en un contexto en el que el consumidor prioriza el ahorro. La inflación alimentaria que está asfixiando económicamente a las familias españolas, sobre todo a las más vulnerables, ha convertido el precio en un factor decisivo en el proceso de toma de decisiones de compra. Sin embargo, hay algunas excepciones en las que los consumidores priorizan otros aspectos frente a lo que cuesta un determinado producto.
El último estudio de AECOC Shopperview, que se ha presentado esta semana en el 25º Congreso AECOC (Asociación de Empresas de Gran Consumo) de Frutas y Hortalizas, indica que el primer motivo de compra para los consumidores no es el precio sino el aspecto de los alimentos. Así, el 79% de los consumidores citan la apariencia como factor prioritario frente al coste, señalado por el 76%.
En el caso de las frutas y hortalizas, el 50% tiene en cuenta que sea un producto de temporada, el 52% compra productos frescos de proximidad y el 32% pide que la producción sea respetuosa con el medioambiente.
Más allá de todos estos aspectos, en la compra de productos frescos, lo que busca el consumidor es el consejo del experto. Casi la mitad reconoce que compra en función de lo que le recomienda su frutero. Sin embargo, para la imagen de marca, aún queda mucho camino por recorrer. En el caso de los productos frescos, solo para el 23% la marca es relevante en su decisión de compra.
Las marcas han servido desde su origen para que los consumidores puedan distinguir los artículos de distintos productores y constituyen unos de los principales activos de las compañías. Como dice la Asociación Americana de Marketing, “una marca es un nombre, término, diseño, símbolo o cualquier otra característica que identifica a un bien o un servicio de un vendedor cómo distinto de los de otros vendedores”. Pero en el caso de los productos frescos como las frutas y las hortalizas, las marcas han estado ausentes durante muchos años.
Los miembros de los canales de producción y comercialización son conscientes del valor de marca desde la perspectiva del consumidor. Éste es el que reconoce las dimensiones de las distintas marcas y el que valora unas más que otras a la hora de pagar un precio mayor. Una encuesta realizada por la Universidad Politécnica de Valencia desvela que tres cuartas partes de los entrevistados coinciden en destacar cómo las marcas de frutas y hortalizas más reconocidas a Plátano de Canarias, Zespri y Pink Lady. Más de la mitad de ellos refirieron otras marcas como Kumato, Fashion o Persimon. Y otras que aparecieron en más de un entrevistado fueron Bouquet, Dulce, Bollo, Melones el Abuelo, Marlene, Del Monte o Florette, aunque esta última pertenece a la categoría de las verduras frescas envasadas.
Algo sí se avanza en esta materia.